B-Cycle
¿Sabías que una de las industrias que más aporta a la producción de plástico corresponde a la industria de la cerveza? En Chile producen anualmente cerca de 86,7 mil toneladas de plástico sólo por concepto de empaquetar sixpacks de cerveza, impactando negativamente en los océanos y las especies marinas.
¿Cómo podemos solucionar esta problemática? A través de B-Cycle, un biopackaging de sixpacks de cerveza elaborado a partir de los residuos de cebada de la propia industria cervecera, siendo un producto biodegradable, orgánico y compostable, que aporta incluso nutrientes a los suelos.

De esta forma, lograremos reducir en un 76% la cantidad de plástico que generan los productores industriales de cerveza, fomentando así una disminución considerable de los desechos plásticos en océanos y suelos, mientras que contribuiremos a reducir en un 10% los volúmenes de desechos plásticos que, en general, terminan en vertederos ilegales afectando directamente a las comunidades aledañas.
Se estima que en Chile se generan anualmente cerca de 990 mil toneladas de plástico, de las cuales aproximadamente un 92% no se recicla, incluso cuando el tiempo de degradación del plástico es de alrededor de 1000 años. Esto se ha transformado en una amenaza para todos nosotros, pues estamos siendo expuestos a grandes cantidades de partículas plásticas y aditivos químicos que se liberan de estos desechos, principalmente a través del consumo de productos del mar y de la tierra, del agua potable y del aire, que pueden tener efectos nocivos para la salud, como afectar la función sexual y aumentar la incidencia de mutaciones y cáncer
En este contexto, una de las industrias que más aporta a la producción de plástico en su conjunto corresponde a la industria de la cerveza, quienes producen anualmente en Chile aproximadamente 86,7 mil toneladas de plástico sólo por empaquetar sixpacks de cerveza. Esto, a su vez, se ha transformado en una problemática para los productores industriales de cerveza, pues el polietileno de baja densidad, del cual está compuesto el packaging, es de difícil recolección, separación y clasificación, siendo entonces aún más sencillo que estos lleguen a los océanos y suelos a contaminar.
Se define que nuestro segmento de clientes a los que está enfocado este proyecto son los productores industriales de cerveza que utilizan latas del tipo 211 para comercializar su producto. En esta misma línea, se define que nuestro segmento de usuarios corresponderá a los consumidores habituales de cerveza, específicamente en formato de sixpacks de latas. Por ende, el sustento de nuestra propuesta de valor se centra en que los productores industriales de cerveza enfrentan la necesidad de desarrollar biopackagings sustentables que se condice con el interés de los consumidores de cerveza de adquirir sixpacks ecológicos que no generen residuos.
De esta forma, lograremos reducir en un 76% la cantidad de plástico que generan los productores industriales de cerveza, promoviendo una considerable disminución de los desechos plásticos en océanos y suelos que permitirá reducir los impactos de estos sobre los ecosistemas y seres vivos. Asimismo, contribuiremos, a través de una externalidad positiva, en la reducción de un 10% de los volúmenes de desechos plásticos que terminan en vertederos ilegales, afectando a comunidades aledañas, cuyas necesidades y propuestas se han canalizado a través de su participación en cabildos ciudadanos autoconvocados, que nos han permitido realizar este diagnóstico.
A partir de la problemática previamente descrita, surge B-Cycle, un biopackaging de latas de cerveza, que sustituye al plástico, y que está elaborado de los residuos de cebada de la propia industria cervecera, es decir, revalorizando los desechos generados por esta industria. Funciona como una lámina superior de 10x10 centímetros, elaborada principalmente a partir de orujo de cebada, en conjunto con aglutinantes, plastificantes y preservantes orgánicos, es decir, consolidando un bioplástico con carga, que cuenta con cuatro orificios mayores de 5,5 centímetros de diámetro, que permiten a nuestros clientes acoplar cuatro latas de cerveza del tipo 211, y un orificio central menor de 2 centímetros de diámetro que permite a nuestros usuarios poder manipular y transportar este biopackaging con facilidad.
Así, generamos un producto biodegradable, orgánico y compostable, que entrega un marketing verde asociado, todo esto a partir de la revalorización de los residuos de la propia industria cervecera. De esta forma, B-Cycle soluciona el problema del plástico en la industria de la cerveza, pues sustituye su uso por un biopackaging elaborado de los propios residuos de cebada de su industria. Y en esta misma línea, nuestro producto puede terminar en los suelos y al ser biodegradable demorará cerca de seis meses en descomponerse, entregando nutrientes y beneficios a los suelos, mientras que si llega a terminar en el mar, será fuente de alimento para los peces y toda la fauna marina.
- Alejar los modelos de negocio del uso de plásticos en el embalaje y el transporte
- Prototipo
- Con fines de lucro
- Tecnología
- Distribución
- Monitoreo y evaluación.
